Hoy voy a hacer algo inusual en mi, voy a poner una receta que no es mía y aunque reconozco que la segunda vez que la hice la cambié ligeramente y me gustó más os la voy a poner tal cual. Lo voy a hacer porque me apetece hablaros de libros, sí de esos con sus páginas, sus tapas, su tacto a papel, su calidez y clasicismo. En la era en lo que todo está digitalizado, actualizado y todos los zados que os podáis imaginar a una servidora le cuesta mucho resistirse a husmear entre las baldas de alguna librería que otra. En lo que uno busca, rebusca y ojea de vez en cuando encuentra uno de esos libros que se te pega a las manos, y no porque estén sucios o pegajosos, si no porque te los imaginas conviviendo contigo de por vida y eso no hay libro electrónico que se acerque a la sensación de poner otro libro más en tu rinconcito particular.

libro

Lo sé, no se puede poner fronteras al avance pero me cuesta, me cuesta una barbaridad. Dejar a un lado el pasar páginas, el sentir las páginas, poder marcar, ojear, volver a ojear. Si os soy sincera no imagino leerle a mi hija su cuento de cada noche desde una Tablet o similar. Me gusta el ritual, me gusta que ella vaya a su rincón de lectura y elija que historia quiere vivir esa noche. Me resulta más cálido, y no sólo ese ritual, compartir con ella esas páginas que un día fue parte de un ser vivo, me cuesta renunciar a algo que espero que no desaparezca.

Aquel día que rebuscaba en una librería me topé con el libro del que os hablo hoy. À La Mère de Famille me enganchó por su historia, leer la historia de esta pastelería parisina intercalada por recetas y fotos impecables hizo que este libro formara parte de mi pequeña colección de libros de cocina. Me alegro de haberlo encontrado y que forme parte de esa pequeña herencia que dejaré algún día a la parte de vida que deje en este mundo. Con ellos mis cuadernos de recetas, escritos a mano, con páginas salpicadas de ingredientes varios, con vida mucha vida, tachones, correcciones… Porque no me imagino la calidez de dejar unos enlaces a blogs como de sentir ese momento en el que escribiste aquello que quedará para siempre.

 

Bizcocho de limón de À La Mère de Famille.

bizcocho de limon

Ingredientes.

4 huevos

280 gramos de azúcar

100 gramos de nata líquida

70 gramos de mantequilla

220 gramos de harina

4 limones

6 gramos de Royal

Para el jarabe: 250 gramos de agua, 25 gramos de zumo de limón y 100 gramos de azúcar.

 

Cómo se prepara.

Empezaremos rallado los limones limpios encima del azúcar. En un cuenco batiremos los huevos con el azúcar, cuando blanquee añadiremos la nata, no tiene que estar fría. Por otro lado añadiremos la harina y el Royal, mezclaremos bien y meteremos en un molde rectangular no demasiado pequeño y hornearemos 5 minutos a 200 grados y 35 minutos a 155 grados.

Sacaremos y dejaremos enfriar antes de echarle por encima el jarabe que haremos mezclando el agua, el zumo de limón y el azúcar glas. Cuando tengamos la mezcla bien homogénea lo glasearemos con el bizcocho desmoldado y sobre una rejilla.

corte

On egin!