Empezaría diciendo una expresión tan manida como falsa: “se nos ha quedado un mundo…”. Y es que eso de pensar que el mundo en algún momento ha sido un remanso de paz o nosotros una especie que rozara la perfección podríamos valorarlo desde esa perspectiva pero lamentablemente nuestra historia nos avala como la mayor especie invasora y destructiva de este planeta. Lo que si es penoso asimilar que esa pequeña esperanza que guardamos como niños pequeños de que un mundo mejor es posible se desploma. Lo que tengo claro, y cada día más, es que no hacemos mas que mal a este planeta y que creemos él morirá con nosotros, como si esto también lo hubiéramos inventado nosotros con las fronteras y los dioses, las leyes y las jerarquías. Lo dejaremos maltrecho, habremos sido los peores inquilinos que pueda haber tenido este planeta pero seguirá sin nosotros como ya existía sin nosotros. Por eso creo que ese eslogan de “no hay planeta B” no es justo con el tratamiento que le deberíamos de dar al hecho de cargarnos todo y todos a cada paso. Da igual si es polución, guerras, pandemias… todo es responsabilidad nuestra, demasiados millones de cabezas pensantes, demasiados egos, demasiados seres que no parecen humanos.
Miras tan solo 2 años atrás, cuando nos dimos cuenta que nuestra libertad no era algo adquirido, un virus nos lo puso delante de nuestras narices y parecía que algo que nos unía a toda la humanidad seria el punto de inflexión, de cambiar para bien. Lamentablemente eso no es verdad y siguen cayendo bombas pero no de chocolate en tantos países del mundo… Qué bien estaría el planeta sin nosotros.
Bombas de chocolate
Plato: General8
raciones1
hora15
minutosIngredientes
1 huevo
250 gr de harina fuerte
75 gr de agua
75 gr de azúcar
20 gr de leche entera
3 gr de sal
15 gr de levadura fresca de panadería
20 gr de mantequilla
- Crema de chocolate
200 gr de chocolate negro de repostería
100 gr de nata para montar.
1 cucharilla de mantequilla
Instrucciones
- Empezaremos poniendo la harina, la sal, la levadura, el azúcar, el agua, la leche y el huevo en un cuenco. Amasaremos hasta conseguir una masa homogénea. Dejaremos reposar la masa en la encimera, tapada al menos diez minutos.
- Añadiremos la mantequilla a temperatura ambiente la masa. Integraremos la mantequilla, nos costará pero poco a poco veremos como se va uniendo a la masa. Haremos amasados cortos y reposos de un par de minutos, esto nos ayudará mucho.
- Meteremos la masa en un cuenco, taparemos, dejaremos en un rincón de la cocina y dejaremos fermentar una hora.
- Sacaremos la masa del cuenco, la estiraremos con ayuda de un rodillo dejándola en un grosor de un dedo y medio. Cortaremos la masa y la dejaremos fermentar, tapado con film transparente y sobre papel de hornear hora y media hasta que duplique su tamaño.
- Trascurrido este tiempo freiremos las bombas en abundante aceite de girasol u oliva suave. Lo haremos a temperatura media para que se hagan bien por dentro y no se quemen por fuera.
- Sacaremos a un plato con papel absorbente.
- Pondremos el chocolate, la nata y la mantequilla en un cuenco y la derretiremos al baño María. La crema resultante la meteremos en una manga pastelera.
- Haremos una pequeña incisión a las bombas, las rellenaremos y las espolvorearemos con azúcar glas.
Vídeo de la receta
Notas
- Los tiempos de fermentación siempre depende de la temperatura de vuestra casa y de la época del año. Ésta es una masa que también se puede hornear aunque el resultado no va a ser el mismo. También podemos jugar con el relleno, la podemos rellenar de nata, crema o confitura de frutas.