Es bonito ser agradecido y a mi siempre me ha gustado dar las gracias teniendo un detalle hecho con mis manos. Estas magdalenas (muffins para modernos) fueron un detalle para una profe de mi pequeña Laia por que al final sabes que si ganas a alguien por el estómago lo tienes para siempre. Lo que si os digo es que hay que tener mucho cuidado con el umbral de agradecimiento, y sobre todo el de confianza, al final hay gente que se cree que todo el campo es orégano y que tu gratitud o la falta de ella es un sumisión de por vida. La falta de honestidad que campa por el mundo hace de nosotros unos desconfiados, unos animalillos golpeados con vara que cada vez que ven un palo salen corriendo.
No me gusta esta sensación pero está claro que de todo se aprende y todo deja su poso como si tú fueras una taza de café. Dejándo la negatividad a parte, me cuesta pero lo voy a intentar, hay gente que vale y mucho. Hay personas que son simplemente eso, personas sin mas dobleces, sencillo, sincero y por esas personas una esta dispuesta a andar a tropezones por la vida. Cada vez que alguien me falla me digo a mi misma que nunca volveré a confiar en nadie pero se que sería incapaz de vivir así. Prefiero caerme una y otra vez y con ello saber que me encontraré gente que merece la pena, la verdad es que cada vez es mas complicado o yo cada vez soy mas exigente o pero aún, tengo mala suerte o un imán potente para atraer a “personas” con muchas comillas. Por cierto no tengáis miedo ni a las personas, ni a vuestros pensamientos ni mucho menos a utilizar especias en recetas dulces, que no me entere yo.
No os voy a pedir que hagáis estas magdalenas, no lo voy a hacer por que no hace falta. Me habéis pedido la receta, esa manía mía de poner fotos por allí y por allá, y hoy era el día en el que mi insomnio y dos cafés seguidos me han dejado tiempo para escribir, pensar y decidir que ésta era la receta del día. Por que hoy hace un día cojonudo para ir a comprar unas frambuesas, por que hace un día que te pasas para ver salir algo maravilloso del horno y encima tener con quien compartirlo. Rodearos bien, pocos pero cojonudos.
MAGDALENAS DE FRAMBUESAS. MUFFINS DE FRAMBUESAS.
Ingredientes.
125 gramos de harina floja o repostera
50 gramos de mantequilla
100 ml de leche entera
1 huevo L
8 gramos de Royal (impulsor)
1/2 t bicarbonato (1/2 de cucharilla)
100 gramos de azúcar blanca
30 gramos de miel suave o azúcar invertido
125 gramos de frambuesas
1/2 vaina de vainilla
Ralladura de naranja
Una pizca de sal
1/3 t de comino molido (1/2 cucharilla)
1/4 t de nuez moscada (1/4 de cucharilla)
Cómo se prepara.
Empezaremos rallando la naranja en el azúcar y añadiendo también las especias, removeremos y reservaremos. Por otro lado pesaremos la harina, sal, Royal y bicarbonato. A la mezcla de azúcar añadiremos la mantequilla derretida (que no caliente), la leche y el huevo y batiremos bien hasta tener una mezcla homogénea.
A la mezcla anterior iremos añadiendo la de harina con la sal, el Royal y el bicarbonato. Cuando hallamos mezclado bien rellenaremos las cápsulas y con el horno caliente a 180 grados las hornearemos entre 25 y 30 minutos dependiendo el tamaño de nuestras magdalenas.
También les podemos poner un topping antes de meter al horno de avena. Para ello necesitaremos: 50 gramos de mantequilla fría en cubos, 25 gramos de harina, 60 gramos de copos de avena y 30 gramos de azúcar moreno.
Mezclaremos bien con las manos y pondremos una cantidad generosa sobre cada magdalena.
Sacaremos las magdalenas del horno y dejaremos enfríar sobre una rejilla.
On egin!
Podéis cambiar las frambuesas por fresas troceadas, si lo hacéis que no sea en trozos muy pequeños porque sino desaparecerán en la magdalena.
También podéis prepararlas sin especias, eso sí, esa ya será otra receta, con menos sabor y menos alegría. No tengáis miedo a las especias, os van a sorprender.
Me encantan todas tus recetas, son espectaculares! ¿Has pensado en darte a conocer en alguna red social especializada? Hay una app que se llama Foodies Moveando y seguro que tendrías mucho éxito. Yo te voto! 🙂
Gracias por el piropo, de vez en cuando un palmadita en la espalda viene bien. No conozco la App que me comentas, le echaré un vistazo. Un saludo.