El otro día fuí al supermercado. Este inicio de texto podría ser de algo cotidiano que os quisiera contar pero la cotidianidad ya no es lo que era y ya veremos como volverá a ser. No he vuelto a salir y sólo salí aquel día desde aquel sábado que terminé de trabajar a las dos y ya no volví más. Es probable que éste fuera una de las experiencias mas estresantes de mi vida. Se me quitaron las ganas de salir, de hecho al volver a casa me sentí como un neandertal que en su refugio siente alivio y seguridad.

Bueno, que este no va a ser un texto triste ni mucho menos. El caso es que estaba en el supermercado, me había hecho la lista de la compra midiendo mis pasos para no recorrer mas local del que debía, buscando y comprando lo que podía para hacer ese menú semanal que llevaba en mi cabeza. Ya lo tenía casi todo pero me faltaba echar un vistazo a la zona de congelados, esa que sólo utilizo para coger ese helado que tanto me gusta. Pero esta vez tenía que mirar comida común y corriente. A mi izquierda una chica (de mi edad mas o menos, jovenzuela vaya) miraba atónita la vitrina de congelados, hablaba para si misma en bajito y se agarraba la cabeza, estaba claro que algo le pasaba. Seguí con mi compra, cogí unos guisantes congelados (me gustan mas que los de conserva) y me giré para coger unos yogures. En ese preciso instante un chico doblaba la esquina y se incorporaba al ya abarrotado pasillo del congelados y lácteos, ya éramos 3. Va directo a ella y le dice: “No te preocupes que he cogido: una botella de txakoli, una de vino blanco, otra de tinto y he conseguido unas cervezas!”, ella no responde a eso, le mira y le dice: “tu crees que esa caja de verdura congelada se mete al microondas o se hace en la sartén” y sigue: “o esas espinacas que vienen en cubos que se harán cocidas?”. Él sin poder aportar mas que su triunfo vinícola le mira y le dice: “Y si cogemos unas pizzas y listo?”, a lo que ella metida en el mismo drama culinario le espeta un angustioso “es que quiero comer bien”.

Tengo que reconocer que en otra situación les hubiera aconsejado, incluso aclarado dudas o haber dado alguna receta pero yo estaba concentrada y deseando irme a mi casa. Si que me quedaron ganas de decirle a él cuando llegó triunfante con sus bebidas un “eres un crack”.

Y es que ahora nos hemos dado cuenta que tenemos que saber cocinar, que queremos saber hasta hacer pan. Está agotado en los supermercados esas levaduras que de normal se mueren del asco.

También deciros que las que y los que cocinamos en casa ahora mismo somos los jefes, controlamos el cotarro y somos capaces de comprar y consumir con responsabilidad. Nunca es tarde si la dicha es buena, que no se te vayan las ganas de aprender algo tan importante para nuestra salud, disfrute y día a día. De todo esto también sacaremos cosas buenas, que no se diluyan con el tiempo. También estoy de acuerdo, que ahora mismo que no nos falte el txakoli, el vino blanco, el tinto y la cerveza.

 

 

 

 

 

 

 

 

Nota importante: Os dejo también a continuación el link de la receta de Galletas que hicimos el pasado miércoles y que tanto os gustaron (pincha aqui).

 

Atentos que en mi Facebook e instagram (@Ainaralo) ya os he puesto los cursos de esta semana:

Miércoles “Magdalenas de limón”

Viernes/Sábado “Hogaza de pan fácil”.

 

Juntos vamos a poder con esto.

Me apetece dejaros lo que escribí en mi Instagram el sábado noche con el subidón de adrenalina que llevaba. Nos ayudamos mucho y eso es muy grande.

 

“Medir la felicidad a día de hoy es para basculas muy precisas, hay que medir hasta la última micra y no desperdiciar ni un grano. En esta #pizzaparty me habéis hecho intensamente feliz y no por el número de personas sino por las docenas y decenas de mensajes, de fotos compartiendo con los vuestros. Con ese plan especial programado, así nos hemos sentido todos. Juntos, yo os he imaginado a todos vosotros, muchos amigos y seres queridos, personas que aprecio y otros muchos que me llegáis y nos unen las redes. Sea como fuere, sois mi gente, porque nos impulsamos juntos, nos damos la mano y nos ayudamos. En momentos de desgracia he vivido un momento precioso e inolvidable. Sé que ya formo parte de la vida de muchos porque hacer pizza es muy grande. Millones de gracias a todos, increíble las 191 almas que habéis estado ahí, brindando, bailando, solos-acompañados, con vuestros pequeños compartiendo cocina o con vuestros amigos por skype.Brindo por vosotros. La vida es increíble. #lapanaderita #okiñanaiz #vivalavida #pizza #juntos #felicidad #compartir”

Pizzas

Receta de ainaraloPlato: General
Raciones

4

raciones
Tiempo de preparación

30

minutos
Tiempo de cocinado

30

minutos
Caloríaskcal

Ingredientes (PARA 2 MEDIANAS)

  • 400gr de harina de fuerza.

  • 200/220gr de agua.

  • 22gr de aceite de oliva.

  • 4gr de levadura fresca/2gr de levadura seca.

  • 8gr de sal.

  • TOPPINGS
  • Salsa de tomate concentrada.

  • Mozzarella.

  • Verudras.

  • Setas.

  • Pollo.

  • Orégano.

Instrucciones

  • Empezaremos partiendo de la base que para tener una buena masa hay que amasarla un día antes, incluso dos, de ahí que necesitemos una harina con mucha fuerza (mas que la del supermercado pero todos sabemos que cuando volvamos os diré dónde y qué tenéis que comprar.
  • A lo dicho, un día antes pondremos la harina, la sal, la levadura, el aceite de agua en un cuenco y amasaremos. Daremos amasados cortos y dejaremos reposar la masa unos minutos en la encimera volviéndola a amasar un par de minutos. Haremos éste trámite hasta que tengamos una masa lisa y tersa (con 3 o 4 tandas seguramente será suficiente). Cuando tengamos la masa, haremos un bola con ella y la meteremos en un cuenco, taparemos bien con film transparente o también la podemos meter en un tupper. La dejaremos en la nevera hasta el día siguiente.
  • Al día siguiente sacaremos la masa del frigorífico, porcionaremos en 2 trozos y dejaremos en la encimera tapado al menos una hora.
  • Estiraremos la masa y la pondremos sobre un papel de hornear. Añadiremos el tomare, el queso y los demás ingredientes terminando con el orégano.
  • Con el horno caliente a todo lo que te de (suelen ser 275 grados), dejaremos tan solo una bandeja en la parte superior del horno.
  • Hornearemos nuestra pizza en la base del horno (con el papel de hornear siempre) unos 5 minutos.
  • A continuación subiremos la pizza a la bandeja que habremos dejado puesta en la parte superior y hornearemos 3 o 4 minutos más.

Vídeo de la receta

Notas

  • Para todos los trucos y chascarrillos pinchad en el video o Pincha en el enlace PIZZA trucos .