Mientras cocinaba andaba pensando en la intro de este post. La palabra polvorón tiene un toque picante aunque los comemos una vez al año (o así debería ser), es una palabra que muchos utilizan sábado si y sábado también aunque no se si es más una fantasmada que otra cosa. Podría ir por ahí mi post pero poner fotos en Instagram me ha llevado a hablar de otras cosas un poco menos jocosas. Estaba pensando, ahora que me salen trabajos, ¡si, trabajos! me encuentro sumergida en el tortuoso mundo de los autónomos. Cada vez que oigo esa frase de, “el autoempleo es la solución a la situación de paro de este país”, me dan ganas de cambiarme de país o incluso de planeta. No hay opción, el tema autónomos es un auténtico despropósito. Ciudadanos que nos autoinventamos, luchamos e intentamos sobrevivir nos encontramos con el sangramiento de este sinsentido de aportaciones casi altruístas en forma de impuestos. Es fácil decirnos que hay que ser legal (ya que ellos no lo son), es fácil decir que como somos una panda de tramposos que viven en la economía sumergida (ellos viven rodeados de sobres) somos responsables de que no haya dinero para lo más básico. Me llevan los demonios de ver a una panda de encorbatados viviendo de nosotros y no sólo eso, riéndose de nosotros.
Somos el país de Europa con una de las tasas de autónomos más alta, además de ser uno de los paises de Europa dónde esas tasas no cubren ni la mitad de lo que debérían. Somos Europa para deber dinero, para que unos cuantos usureros nos presten los que otros se han gastado. No importa quién se lo gastó solo importa que la deuda es nuestra. Me da pena pensar que unos cuantos millones de votantes no canbiarían su voto ni aunque les escupieran a la cara. Me da pena pensar que en este país a nadie le interesa que ni tú ni yo salgamos adelante, tan sólo les importa que sus impolutos culos sigan sentados en algún sillón público para poder seguir viviendo del cuento.
Mientras escribo como trocitos de uno de estos polvorones, estos que han abierto el apetito a muchos y os ha hecho preguntar a cuanto vendo el kilo. Si fuera tán fácil, en este país está prohibido vender comida hecha en casa, vender comida casera en la calle, está prohibido todo lo que sea avanzar y legislar con cabeza para que la gente pueda ganarse la vida HONRADAMENTE. Ser emprendedor en este país es un deporte de riesgo, una buena idea se convierte en un sinfín de papeles, exigencias y chorradas varias hasta conseguir que la gente pierda la ilusión.
Estoy ácida, lo sé. Estoy un poco hasta las pelotas de ver, oir y tragar mierda. Estoy al límite aunque me voy a quedar con un frase que anda por estos mundos virtuales. “Les quitaron tanto que acabaron quitándoles el miedo”.
POLVORONES DE LIMÓN Y JENGIBRE
Ingredientes:
100 gramos de manteca de cerdo
100 gramos de azúcar glas (un poco más para decorar)
125 gramos de almedras molidas
250 gramos de harina de trigo (en mi caso, panadera)
Ralladura de 2 limones
1 pizca de pimienta negra
1 pizca de sal
1 cucharilla de jemgibre en polvo
El zumo de 1/2 limón pequeño
Proceso:
Pondremos la harina sobre la bandeja del horno y la hornearemos a 190 grados 10 minutos. Haremos lo mismo con la almedra molida pero en este caso la hornearemos tan solo 5 minutos. Por otro lado mezclaremos la manteca con el azúcar glas para acontinuación añadir la ralladura de los limones, el jengibre, la pizca de pimienta negra y el de sal. Cuando tengamos todo bien mezclado iremos añadiendo la almedra molida y a continuación iremos añadiendo la harina. Terminaremos añadiendo el zumo de medio limón pequeño o si es muy grande un poco menos. Añasarlo es difícil porque es una “masa” bastante harinosa, ayudaros del papel de hornear para aplastarla. Dejarla de un grosor entre centímetro, centímeto y medio y dejarla reposar una hora.
Transcurrido este tiempo cortaremos los polvoroenes con la ayuda de un cortapastas (también los podéis hacer cuadrados cortándolos con un cuchillo) y los iremos poniendo e la bandeja de hornear. Los hornearemos a 190 grados 3 minutos, los subiremos y los gratinaremos a 240 grados 2/3 minutos más. Dejaremos enfríar y los decoraremos con azúcar glas.
on egin!
Totalmente de acuerdo contigo, palos y mas palos en el camino … pero es lo que nos queda … seguir con esfuerzo y esperanza soñando que nuestros proyectos algún día se harán realidad. Te deseamos éxito en tus emprendimientos y muuuuucha paciencia. Besos
Hola Ainaralo,
no estás ácida, es sólo que dices la verdad y eso cada vez está peor visto. Y sí, llegará el momento, porque todo llega, en que a base de quitarnos, nos quiten hasta el miedo… y entonces serán ellos quienes lo tengan…
Saludos,
Jose
Espero que ese día llegue pronto porque sino vamos a perder hasta la dignidad :$
¡Eso nunca! ¡Antes muertos que perder la vida! 😉
Saludos,
Jose
Pues si muy al hilo del post de vendiendo humo partes I y II de mi patio. Q dificil lo ponen todo. Y ya me contaras en q andas metida y consumir entre amigos. Me explico, q si te lo puedo comprar a ti en vez de a la multinacional pues encantada de la vida.
Bss. Maider
A pesar de todo saldremos adelante 🙂
Pues tienes toda la razón. En el tema autónomos a mi también me ha tocado, aquí y en el Reino Unido, nada que ver. Menos mal que nos vienes a endulzar con estos polvorones. Y aprovechando que estoy en Nueva Zelanda y tengo que fardar de algo estas Navidades, igual me ánimo a hacerlos para la family. Muxus.
Nueva Zelanda! Que bueno! Hazlos que vas a atriunfar y estate al loro que pondré mas recetas navideñas.
[…] polvorones el otro día os publiqué una receta de polvorones de limón y jengibre en Mi Rincón (enlace de la receta de polvorones), para los que no os van nada os traigo una idea muy buena que además es muy rápida y fácil de […]